PRONOSTICO DE LA ESTACION METEOROLOGICA LOCAL
Las lluvias de marzo no superarían los 100 milímetros en la zona norte, e irán descendiendo durante el otoño, dando la posibilidad que las zonas anegadas por el agua puedan recuperarse. Para abril, a diferencia de 2015, ya se aguardan temperaturas en los cero grados.
La llegada del otoño traerá un alivio en cuanto a las intensas lluvias del verano y tendrá un descenso paulatino de las temperaturas. Así lo confirmó Saúl Sequeira, jefe de la Estación Meteorológica local que funciona en las instalaciones del Aeropuerto General Pico.
Hace unos días, explicó Sequeiro, se recibió una masa de aire frío proveniente del sur, con una perturbación de altura sobre el este del país que generó mal tiempo. Por esa razón, se produjo un frente frío con tormentas en distintas zonas de La Pampa. El área más castigada por este tipo de temporales ha sido el noroeste argentino, y eso se ha reflejado en los caudales hídricos que no han podido bajar. A partir de allí se han generado inundaciones en diferentes puntos del país.
Lo ocurrido durante enero y febrero, en cuanto a las precipitaciones abundantes, fue atípico, aseguró Sequeira. Con un fenómeno climático que hace años no se producía en esta zona, y que dejó en los meses de calor una importante cantidad de milímetros acumulados. Para marzo, aún se esperan lluvias pero en cuanto a General Pico y la región las precipitaciones no deberían superar los 100 milímetros.
Para la población también fue un verano caluroso, que en realidad mantuvo algunas de las temperaturas habituales de más de 40 grados pero con el alto índice de humedad la sensación térmica fue mucho más alta.
Por otra parte, los temporales ocurridos días atrás, con fuertes ráfagas de viento y caída de granizo, fueron el resultado de una masa de aire muy caliente con elevada evaporación que al ser atravesada por un frente frío repercute sobre la tierra de esa forma. Aunque es interesante pensar que fueron focos localizados, explicó Sequeria, porque la zona de cobertura de esas tormentas no era amplia y tenían más violencia en una región que en otra. Además, se trató de lluvias de corta duración pero con mucha energía, y con una masa de aire que no se disolvía y por ello generaba nuevas lluvias. Siendo esta una de las consecuencias de la denominada corriente de El Niño.
Sequeria indicó que son períodos que se producen después de varios años, extremando las condiciones.
Abril con cero grados.
Para los siguientes días, la presión estará alta y las temperaturas bajarán dando lugar a la llegada de días templados. “Ya estamos entrando al otoño, que en el centro del país suele reflejarse con temperaturas agradables”, indicó el jefe de la estación, una época que podría ser positiva para los productores que están en la temporada de levantar la cosecha. Porque las lluvias se irán retirando de forma paulatina hasta llegar al invierno.
Las temperaturas, en la segunda quincena del mes ya irán mostrando un descenso y para abril ya se podría esperar un registro cercano a los cero grados. Una perspectiva diferente a la que se vivió el año pasado, que conservó días entre calurosos y templados durante el primer cuatrimestre.
Sequeira explicó sobre las posibilidades de dar un pronóstico certero y anticipado, y señaló que se logra con una previsibilidad de tres o cuatro días. Desde la estación meteorológica local el trabajo se limita a recolectar los datos del área y enviarlos a Buenos Aires, al servicio nacional. Porque con las pantallas satelitales logran armar el panorama general del país. Desde allí se remiten después los resultados del análisis con el estado de cada región en particular.
“La Pampa actualmente cuenta con muy pocas estaciones”, dijo Sequeira, al igual que pasa en el resto de la Argentina. El país posee 126 unidades y el número ideal sería contar con unas 640 porque así se lograría mayor exactitud en el pronóstico. Teniendo en cuenta la disposición de la Organización Meteorológica Mundial acerca de la distribución territorial de las estaciones. > La Arena 13-03-16 <
