“TRATO DE PRIVILEGIAR EL FÚTBOL OFENSIVO”.
Tras la sorpresiva salida de Cristian Savarese del Deportivo Winifreda, la dirigencia del Girasolero se movió rápidamente y buscó a su reemplazante. “Hablamos con los jugadores y nos dijeron que querían a un entrenador joven, con ideas y trabajador”, dijeron desde el comando de Winifreda.
El elegido fue Cristian Santa María, identificado con All Boys de Santa Rosa y uno de los mejores formadores del fútbol pampeano, que tendrá a sus 31 años la posibilidad de demostrar sus innovadoras ideas en Primera División.
Será un desafío para ambas partes. Para la dirigencia será toda una apuesta futbolística porque cambiará un estilo basado en el orden y la solidez defensiva por un juego vistoso, de buen trato de pelota y que tiene una premisa clara: “el retorno al potrero”.
Para el nuevo DT el reto estará en poder llevar a cabo su idea futbolera ante un plantel que viene de ser semifinalista del Torneo Provincial. La vara quedó alta, pero las expectativas son las mejores.
Un estilo
Aquellos que siguen el fútbol de las Divisiones Formativas conocerán por dónde transita su estilo. Se pudo observar en toda su dimensión con la categoría 2004 de All Boys que logró el título provincial en 2018 y que hoy es la columna vertebral de la Selección sub-15 que acaba de finalizar en el quinto puesto en el Campeonato Nacional disputado en Santiago del Estero.
En este 2019 estuvo cerca de repetir el logro con la División 2005, pero cayó en la final ante Jorge Newbery de Rancul, quedándose con el subcampeonato provincial.
“Yo quiero que la gente que paga la entrada vea un buen espectáculo”, dice el entrenador que se encuentra realizando el curso de director técnico en la Escuela de César Luis Menotti en Rosario.
La pretemporada comenzará el lunes 27 de enero, su profesor será Martín Yaco y aún no está definido su ayudante de campo. “Le propuse a Tati Erro con el que tengo una relación, pero me dijo que no podrá por sus horarios, así que aún no está resuelto quién será el ayudante”, expresó en diálogo con El Araucanito.
- ¿Cuáles son las expectativas? - Yo dirijo desde los 16 años en las menores y tenía ganas de dar el salto. Las expectativas son altas, obviamente que hay que trabajar y tratar de sacar un plus. Winifreda siempre está peleando y le falta dar ese golpe final. Yo me acuerdo en la época donde jugaba Julio Furch que llegaron a las semifinales del Provincial y quedaron a las puertas. Mi intención será intentar sacar ese plus para que Winifreda pueda conseguir dar ese salto.
- Falta mucho para el comienzo de la pretemporada, pero ¿sabés con qué jugadores vas a contar? - Los dirigentes me dijeron que la prioridad de ellos era mantener el plantel, así que voy a contar con Lucas Vassallo y Gastón Bornes, además volverán Franco Galván que estaba en Uriburu y Facundo Rach.
- Vas a pasar de dirigir en Divisiones Formativas a Primera División. ¿Qué creés que vas a tener que cambiar en el manejo del plantel? - Para mí dirigir en Formativas es más difícil que dirigir en Primera. ¿Por qué? Porque nosotros a los chicos tenemos que enseñarles la técnica, luego la introducción a la táctica y el juego de 11. En cambio el jugador de Primera ya comprende mejor las cosas. Con los grandes vos hacés un ejercicio, lo repetís tres veces y el futbolista ya lo memoriza. Será mi primera experiencia, pero estoy muy seguro de lo que voy a hacer.
- ¿Qué hablaron con los dirigentes? - Cuando me reuní les comenté mi metodología de trabajo que no es común en La Pampa. Tiene que ver con mi formación en la Escuela de César Luis Menotti. Sin desmerecer al fútbol pampeano, allí se estudian en profundidad los conceptos del fútbol. Te hace entender un poco más el fútbol y mirarlo con otros ojos. Te das cuenta que el jugador de Primera División, por más que sea grande, también tiene que aprender.
- ¿Cómo vas a hacer para plasmar una idea “menottista” en un plantel que logró resultados con otro estilo de juego? - Será un desafío lindo para mí. Yo creo que desde el primer día que comencemos la temporada los chicos tienen que captar la idea. Nosotros les vamos a dar el balón como elemento fundamental de la pretemporada para que vayan entendiendo que es lo que quiero. Siempre digo que en el partido hay una sola pelota y si la tengo yo el rival no la tiene. Tendré que convencer a los chicos que si la pelota es nuestra, el rival no la tendrá y también esa es una forma de defenderse y de que no te lastimen. Cada uno tiene su libreto, yo trato de privilegiar el fútbol ofensivo. A mí me gusta que la gente que paga la entrada vea un buen espectáculo. Me gusta lo atrevido, que vuelva el potrero que es el ADN argentino y que nosotros de alguna u otra forma tenemos que volver a reflotarlo.
- Además, vas a tener la vara altísima porque vienen de ser semifinalistas del Provincial... - Sí, seguro que será altísima. Pero cuando tomé la decisión de dar el salto para dirigir en Primera hablaba con algunos jugadores y les decía: “Yo quiero sangre”, quiero sentir esa adrenalina del día a día y qué mejor que hacerlo en Winifreda que estuvo a un paso de ser finalista del Provincial.
- ¿Cómo es la experiencia del curso en la Escuela de César Luis Menotti?
- Es un campus virtual, en algunas oportunidades hay que hacer prácticas presenciales. Es el curso de técnico que es dictado, entre otros, por Jorge Valdano, César Luis Menotti, Juanma Lillo, Rubén Rossi -uno de los mejores formadores de Argentina- y así es el resto de las clases. Es de muy alta calidad. En el tercer año para que me den la licencia tengo que tener un año de experiencia en un plantel profesional. Es casi imposible. Yo quiero seguir progresando, pero cuando termino el tercer año no me van a dar la licencia, encima en La Pampa el único equipo a nivel profesional es Ferro de Pico. Lo que se hace en la Escuela es profundizar en el fútbol argentino... se recorre la historia, la táctica, la estrategia, hay una metodología que es volver a traer al potrero al campo de juego. El potrero se ha perdido y cada vez vemos menos gambetas y el fútbol se ha vuelto más físico. Cuando nosotros miramos fútbol ¿qué vemos? el golazo que hace uno, cómo le pega a la pelota otro... el ADN argentino es el potrero.
Fuente: El Araucanito
