Winifreda concretó una memorable remontada el sábado en el Turnes cuando perdía 2-0 y llegó al empate con uno menos. Cristian Savarese, el DT, habla del sentimiento.
Deportivo Winifreda está de nuevo en la pelea. Después de un inolvidable Torneo Provincial 2019 donde fue semifinalista, el equipo que conduce Cristian Savarese recuperó la confianza y nuevamente es protagonista del campeonato doméstico. La ilusión de quedarse con el Clausura está más viva que nunca.
Mientras las luces del centralismo de la capital pampeana alumbran el buen presente de Atlético Santa Rosa y General Belgrano, a pocos kilómetros un equipo integrado en un 95 por ciento por pibes del pueblo sueña en grande.
Después de un inicio de campeonato donde no acompañaron los resultados, el equipo enlazó tres victorias consecutivas y un empate con un hombre menos en el Ramón Turnes el sábado por la noche.
Su entrenador analizó el presente de un club que se encuentra en pleno crecimiento institucional y deportivo, con el apoyo y la colaboración de todo un pueblo que se ilusiona con volver a estar en el Provincial y -porqué no- con lograr su primer título de liga.
- Hay pocos antecedentes de equipos que le puedan revertir el resultado a All Boys en su cancha y con un hombre menos... ¿Creés que no se le dio dimensión al resultado obtenido el sábado?
- Arrancamos perdiendo 2 a 0 en poco tiempo, parecía que el resultado iba a ser muy abultado, pudimos descontar y nos dio esperanzas. En el segundo tiempo salimos con la misma mentalidad, sabiendo que habíamos tenido llegadas pero no logramos concretarlas. Con la expulsión se volvió a hacer cuesta arriba, arriesgamos y pudimos empatar. No me quedo con el resultado de que "se le escapó a All Boys" sino que hubo un rival que hizo méritos para llegar a la igualdad.
- Ante la adversidad el equipo demostró fortaleza mental...
- Como grupo hacemos mucho hincapié en lo mental, hablamos mucho. Si nosotros vamos pensando que enfrentamos a un rival que puede ser superior en jerarquía o creemos que somos un rival inferior, ya arrancamos perdiendo el partido. Nosotros fuimos a jugar sabiendo que con nuestras armas podemos dar pelea. Sabemos que de igual a igual podemos pagarlo caro pero tenemos que creer, nosotros potenciamos lo que tenemos, pero no olvidamos que es un partido de fútbol que tiene estas cuestiones en su desarrollo. Se demuestra que si uno arriesga con un hombre menos puede obtener un resultado. Yo prefiero terminar un partido sabiendo que el equipo arriesgó y fue al frente y no que nos replegamos para no recibir más goles.
- Cuando expulsan a Martínez realizaste tres cambios ¿Estaba planificado o creíste que era el momento de darle una inyección física y anímica al equipo?
- Durante todo el torneo realizamos los cinco cambios para hacer jugar a todos los futbolistas del plantel. Considero que viene bien porque es una de las pocas posibilidades para que los chicos vayan teniendo minutos. Si yo tengo un jugador que va al banco y no tiene competencia no sirve. Necesito que tengan minutos de juego. En el partido de All Boys sí fueron cambios que hice con la intensión de arriesgar y oxigenar la zona media.
- Después del Provincial 2019 pareció que el equipo decayó pero ahora recuperaron aquel nivel ¿a qué se debe esa recuperación?
- Durante la pandemia intentamos tener una rutina de entrenamientos, cuando empezó la competencia hubo lesiones, contactos estrechos o jugadores con síntomas. En la primera rueda predominaron todos esos factores. Además es un plantel que en su base tiene entre 28 y 32 años. Nos costó la falta de competencia pero sobre todo fueron cuestiones deportivas. En las primeras fechas nos empataron o perdimos varios partidos sobre el final. Tuvimos una racha adversa por errores propios o falta de definición, hicimos la autocrítica. A partir de ahí corregimos sabiendo que íbamos a volver a esa idea principal para ser un equipo que pelee entre los cuatro primeros.
- Nunca cambiaste el sistema táctico...pero sí algunas posiciones de jugadores como el caso de Fernando Fridirich...
- Tenemos dos o tres sistemas a los que nos tenemos que adaptar. El domingo cuando perdíamos tuvimos que arriesgar. En el caso particular de Fernando que antes lo utilizábamos como doble 5 o interno pero con libertad para soltarse, habíamos visto que nos podía dar soluciones como enlace o media punta y lo está haciendo bien, es pensante y tiene buen pie.
- ¿Qué plus le dio al equipo la llegada de Mariano Nagore?
- Nos vino en un momento justo donde necesitábamos ser más intensos en cuando a la dinámica de juego. Nagore se insertó en un lugar donde necesitábamos eso y soltamos a Fernando. Él nos da intensidad y dinámica que a mí me gusta en particular. Igualmente necesita competir porque hacía varios meses que no jugaba.
- De afuera se ve un equipo con mucha altura pero que le cuesta aprovecharla tanto en su área como en la del rival...
- Sí, creo que le podemos sacar más provecho. No sé si hay otro equipo en la liga con la altura que tenemos. Si te digo en goles el que más hizo es Bornes que es uno de los que menos altura tiene. Creo que falta terminar de convencernos de que es una buena herramienta. No es algo que solo por tener altura es tirarla y ya está. A veces intentamos otras opciones y no jugar siempre directo. La idea es tener otras herramientas para no quedarnos con qué solo con la pelota parada alcanza.
- ¿Te molesta que se diga que Winifreda apuesta al juego brusco?
- Cada cancha de la liga es difícil y cada equipo intenta potenciarse con las herramientas que tiene. No hay malas intenciones, sí nosotros tratamos de recuperar la pelota con intensidad. Hay que tener autocrítica y analizar porqué nosotros tuvimos un resultado u otro. Nosotros tenemos un perfil de jugador y sabemos que necesitamos ser intensos para recuperar la pelota pero nunca hay malas intenciones. Se potencia lo colectivo, el juego, la posesión pero nunca vamos a hacer un análisis al terminar un partido de si el otro equipo juega más o menos fuerte. En casi todos los equipos los defensores son duros.
- En el caso de Winifreda que son chicos del pueblo son pasionales e hinchas del club en el que juegan...
- Acá los chicos llegan a la cancha con la ropa del trabajo puesta, es todo un esfuerzo, nosotros sentimos que hay detrás un pueblo que te empuja. Tenemos casi todo el plantel que es de acá. Hacemos carne el sentimiento por la camiseta y eso nos sirve. Yo también soy así, hay que dar al máximo. A los que vienen de afuera le hacemos sentir el mismo compromiso y sentimiento que tienen los chicos del pueblo. fuente El Diario de La Pampa
