El jefe de la Comisaría Departamental de Eduardo Castex, Juan Marcelo Bustos Paulino, confirmó que en el edificio donde funciona el Vacunatorio contra el Covid-19 sucedió «un hecho extraño» y «hay una exposición que realizó la encargada del edificio y además tenemos la información que nos brindó la enfermera encargada de la vacunación».
El supuesto intento de sabotaje -ocurrido el mes pasado- tomó estado público en LA ARENA y ahora fue confirmado por fuentes vinculadas a las actuaciones investigativas.
Además, desde el gobierno provincial se giraron 250 mil pesos a la comuna castense para la compra de un grupo electrógeno que se colocará en las instalaciones del Centro Cultural Municipal (CCM) donde se lleva adelante la campaña de vacunación contra el coronavirus; y así se podrá restituir el equipo que actualmente cedió en préstamo la Cospec Ltda.
El jefe de la comisaría castense confirmó que el edificio se encontraba «normal» cuando se retiró una enfermera del Hospital Pablo F. Lacoste, y cuando regresó «la térmica estaba baja». «El edificio estaba cerrado con llaves y cuando regresó estaba todo de la misma manera», expresó -sorprendido- Bustos Paulino. La información difundida revela que el hecho ocurrió un día feriado y había 105 vacunas Sputnik V en los freezers que no alcanzaron a perder la cadena de frío.
El entrevistado admitió que después de ese episodio «se tomaron más recaudos para no dejar el edificio sin seguridad cuando hay vacunas en los freezers».
«Ahora durante la jornada esta el personal (del Hospital Pablo F. Lacoste) y cuando se ausentan ahí el personal policial iba a realizar la custodia para evitar situaciones indeseadas», explicó.
Extraño.
En el céntrico edificio del Centro Cultural Municipal (CCM) de Eduardo Castex funciona el Vacunatorio del Hospital Pablo F. Lacoste que lleva adelante la campaña de vacunación contra el Covid. Fuentes cercanas al incidente comentaron que durante febrero hubo un intento de sabotaje para cortar la cadena de frío de un centenar de vacunas Sputnik V y aportaron datos concretos que incluyen detalles y horarios; aunque también otros estiman que se podrían haber saltado «las llaves térmicas por el elevado consumo» de los freezers.
El extraño suceso se produjo un día feriado cuando coincidentemente habían arribado vacunas a esta localidad. «La encargada del vacunatorio se retiró para bañarse en su casa, aproximadamente a las 14 horas. Regresó rápido y descubrió que estaban bajas las llaves térmicas a las que están enchufados los freezers». Según esta fuente, el freezer «estaba en -26 grados y cuando la encargada llegó se encontraba en -19°. Hubo un incremento de temperatura, pero igualmente permanecía más frío que el requerimiento de esta vacuna, por lo que las dosis no resultaron afectadas».
Desde ese episodio se extremaron las medidas de seguridad, dado que cambiaron las cerraduras del edificio, que estuvo en obras durante un tiempo prolongado. Además, allí funcionó incluso el Concejo Deliberante y se especulaba que «podía haber varias llaves dando vueltas».
Algunas personas dan por sentado que fue un intento de sabotaje a la campaña de vacunación. «Hubo mala intencionalidad porque ocurrió un feriado y después que llegaron las vacunas. No rompieron nada para ingresar al edificio y solo bajaron las teclas de la luz», transmitieron. fuente diario La Arena
